Una sonrisa expresa satisfacción y bienestar y promueve la interacción social al crear un ambiente de confianza y confort y buen humor, tanto en quienes reciben la sonrisa como en quien está sonriendo. Pues lo mismo sucede con el ronroneo de los gatos. Nuestros queridos bigotudos ronronean cuando los acariciamos, cuando duermen en la cama de sus humanos, cuando su madre los amamanta, cuando reciben comida o cuando se limpian mutuamente.
En definitiva, los gatos ronronean cuando se sienten bien, sin embargo el ronroneo es mucho más que una expresión de confort, también puede señalizar estados de ánimo como el miedo, el estrés, el dolor y el hambre.
El ronroneo hace que todo el cuerpo del gato vibre. Según varias investigaciones sobre la morfología de los gatos, estas vibraciones estimulan los músculos y apoyan el crecimiento de los huesos. Este sorprendente descubrimiento sobre el mecanismo de autosanación del ronroneo explica por qué los gatos casi nunca tienen huesos rotos, y si llega a romperse alguno, sana muy rápido.
Por muy diferentes que sean las situaciones de los ronroneos, la finalidad de estos es común: promover y conseguir la relajación y el bienestar. Está demostrado biológicamente que el ronroneo influye de manera positiva en diferentes procesos, como las emociones, el sistema de recompensas central, los estados de ánimo y la conciencia. Tal como han descubierto los veterinarios, científicos y etólogos, este no es el único efecto positivo en cuanto a la salud del animal. Las investigaciones recientes han demostrado que el ronroneo tiene otros beneficios médicos en casos de lesión, enfermedad y dolor.
¿Cómo ronronean los gatos?
Sin duda el efecto del ronroneo es asombroso, pero ¿cómo producen los gatos este zumbido constante? ¿cómo hacen que su cuerpo esté vibrando sin cansarse o tener que coger mucho aire? Estas preguntas se las han hecho muchos investigadores, pero aún no se ha encontrado una respuesta concluyente. Mientras que unos creen que los músculos de la laringe, que expanden y contraen la glotis, son los que ocasionan los sonidos, otros creen que es el duro e inextensible hioides, que une la lengua con los huesos del cráneo. Hay quienes sospechan que son colgajos de piel que se encuentran cerca de las cuerdas vocales derechas, o incluso la arteria principal, los que causan ronroneo. Según las últimas investigaciones actuales, el ronroneo es un efecto de resonancia que se cree que surge cuando las cuerdas vocales rebotan.
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