Las garrapatas no solo son parásitos molestos, sino que también pueden transmitir enfermedades graves a nuestras mascotas. Detectarlas y actuar a tiempo es fundamental para proteger la salud de nuestros perros y gatos.
En este artículo, abordaremos la importancia de la prevención, cómo actuar si encuentras una garrapata en tu mascota y por qué el control regular de parásitos es clave para su bienestar general.
1. Prevención como herramienta fundamental
✅ Beneficios de una buena prevención antiparasitaria:
-
Reduce el riesgo de enfermedades como la enfermedad de Lyme, ehrlichiosis o babesiosis.
-
Evita la transmisión de infecciones a humanos (zoonosis).
-
Mejora la calidad de vida de la mascota al evitar picores, molestias y posibles infecciones secundarias.
-
Menor necesidad de tratamientos farmacológicos a largo plazo.
Una buena rutina antiparasitaria incluye el uso de productos tópicos, collares o comprimidos mensuales, según las indicaciones del veterinario. La vigilancia visual después de paseos por zonas de campo o monte también es esencial, especialmente en Asturias, donde las condiciones climáticas favorecen la presencia de estos parásitos.
2. Qué hacer si encuentras una garrapata
Detectar una garrapata puede ser alarmante, pero lo importante es actuar con calma y de forma segura.
✅ Pasos a seguir:
-
No la arranques con los dedos: hacerlo de forma incorrecta puede dejar la cabeza incrustada y provocar infecciones.
-
Utiliza una pinza específica para garrapatas: gira suavemente hasta que se desprenda por completo.
-
Desinfecta la zona con un antiséptico apto para animales.
-
Lávate bien las manos tras el contacto.
-
Observa a tu mascota durante los siguientes días por si aparecen signos de fiebre, letargo, cojeras o pérdida de apetito. En ese caso, acude al veterinario.
❌ Evita aplicar aceites, alcohol o productos caseros para intentar que la garrapata «se suelte», ya que pueden provocar que el parásito libere más saliva o patógenos al torrente sanguíneo.
3. Diferencias en los riesgos según el entorno
En un hospital veterinario como el nuestro, es frecuente ver diferencias entre los animales que viven en entornos urbanos frente a aquellos que pasan tiempo en zonas rurales o húmedas.
✅ Factores de riesgo:
-
Zonas boscosas o con mucha vegetación.
-
Presencia de fauna silvestre.
-
Estaciones cálidas (primavera y verano, aunque en Asturias pueden encontrarse casi todo el año).
-
Ausencia de protección antiparasitaria.
Por eso, adaptamos los protocolos antiparasitarios según el entorno y estilo de vida de cada animal.
4. Personalización de la prevención
No todas las mascotas requieren el mismo tipo de prevención. La edad, el peso, el estado de salud, el entorno y la actividad física son factores que influyen en el tratamiento ideal.
✅ Recomendaciones personalizadas incluyen:
-
Elección del antiparasitario más adecuado (collar, pipeta, comprimido).
-
Frecuencia de aplicación según el riesgo.
-
Revisión periódica en consulta veterinaria.
-
Educación del tutor para la detección precoz.
Conclusión
Las garrapatas son más que una molestia: son un riesgo real para la salud de nuestras mascotas. Saber cómo actuar ante su presencia, junto con una buena prevención, puede marcar la diferencia entre una simple picadura y una enfermedad grave.
Desde el Hospital Veterinario de Asturias recomendamos mantener una revisión regular, especialmente en épocas de alto riesgo, y acudir al veterinario ante cualquier duda o síntoma preocupante. La prevención, como en muchos aspectos de la salud animal, sigue siendo la mejor herramienta para cuidar a nuestros fieles compañeros.