Cómo saber si tu gato tiene diabetes

La diabetes en los gatos es una enfermedad metabólica relativamente común, especialmente en gatos adultos o con sobrepeso, y es importante identificarla lo antes posible para comenzar el tratamiento adecuado. Los signos de la diabetes felina suelen estar relacionados con problemas de regulación de la glucosa en sangre. Si sospechas que tu gato podría tener diabetes, aquí hay algunos síntomas comunes a los que debes estar atento:

1. Aumento de la sed

Uno de los primeros síntomas más notables en los gatos diabéticos es que beben más agua de lo habitual. Si ves que tu gato está constantemente buscando agua y bebiendo en exceso, esto puede ser una señal de que sus riñones están trabajando más para eliminar el exceso de azúcar en la sangre.

2. Aumento de la micción

Debido al aumento de la sed, los gatos diabéticos también orinan más de lo normal. Si encuentras que tu gato está usando la caja de arena con mucha frecuencia o que las sábanas o el suelo están mojados más de lo usual, esto podría ser un signo de diabetes.

3. Pérdida de peso inexplicada

Aunque los gatos diabéticos a menudo tienen un aumento del apetito, también pueden experimentar pérdida de peso. Esto sucede porque el cuerpo no puede utilizar adecuadamente la glucosa como fuente de energía, lo que lleva a que el gato pierda peso a pesar de comer más. La pérdida de peso puede ser bastante evidente.

4. Aumento del apetito

A pesar de la pérdida de peso, los gatos diabéticos suelen tener un apetito inusualmente elevado. Esto se debe a que, aunque están comiendo más, su cuerpo no está utilizando adecuadamente la glucosa para producir energía, lo que hace que el gato se sienta constantemente hambriento.

5. Letargo o fatiga

Los gatos con diabetes pueden mostrar signos de debilidad o falta de energía. Puede que tu gato se quede dormido más de lo habitual o que no tenga ganas de jugar o moverse tanto como antes. Esto se debe a la falta de energía disponible para el cuerpo debido a la incapacidad para procesar la glucosa correctamente.

6. Mal estado del pelaje

Los gatos diabéticos pueden experimentar un pelaje más opaco, seco y áspero. La diabetes puede afectar la salud general de la piel y el pelaje, ya que el cuerpo no puede mantener la hidratación y la nutrición de la piel adecuadamente.

7. Respiración rápida o dificultad para respirar

En casos más avanzados, los gatos diabéticos pueden mostrar signos de dificultad respiratoria, como respiración rápida o jadeo. Esto puede estar relacionado con un aumento de los niveles de glucosa en la sangre y la producción de cuerpos cetónicos, lo que puede llevar a una condición llamada acidosis diabética, que es una emergencia médica.

8. Deambulación inestable o debilidad en las patas traseras

La diabetes puede afectar los nervios de las patas traseras, causando neuropatía diabética, una condición que resulta en debilidad, dificultad para caminar, cojera o caída de los pies traseros. Los gatos con neuropatía pueden caminar de forma descoordinada o tener una marcha «de pato».

9. Infecciones recurrentes

Los gatos con diabetes tienen un sistema inmunológico debilitado, lo que puede hacerlos más susceptibles a infecciones, especialmente en la piel o las vías urinarias. Si tu gato tiene infecciones recurrentes o parece estar luchando contra problemas de salud constantes, la diabetes podría ser la causa subyacente.


¿Qué hacer si sospechas que tu gato tiene diabetes?

Si observas varios de estos signos en tu gato, es crucial llevarlo al veterinario lo antes posible. El diagnóstico de la diabetes generalmente se realiza a través de un análisis de sangre para medir los niveles de glucosa y una prueba de orina para buscar la presencia de glucosa en la orina, lo que es un signo claro de diabetes.

Tratamiento:

  • Insulina: La diabetes felina suele tratarse con inyecciones diarias de insulina. Es posible que tu veterinario te enseñe cómo administrar las inyecciones en casa.

  • Dieta especial: Muchos gatos diabéticos requieren una dieta especial, generalmente baja en carbohidratos y rica en proteínas, para ayudar a controlar sus niveles de glucosa.

  • Control regular de la glucosa: Es importante monitorear los niveles de glucosa de tu gato, y tu veterinario puede recomendarte controles periódicos.

Prevención:

Si bien la diabetes no siempre es prevenible, mantener a tu gato en un peso saludable, proporcionarle ejercicio regular, y ofrecer una dieta equilibrada son formas de reducir el riesgo. Evitar el sobrepeso y la obesidad, que son factores de riesgo importantes, es clave para prevenir la diabetes en gatos.

2025-10-02T09:55:12+02:00