Si nos seguís en facebook, os habréis dado cuenta de que llevamos unos cuantos días (semanas…) hablando de la calidad de vida y cuidados especiales que requieren los perretes y gatos senior.
Senior, mayores, abueletes, edad avanzada… parece que no hay una palabra «correcta» para describir esta época que, por suerte, pasan muchos de nuestros compañeros de 4 patas. Como nos contaba Mika en su carta: «(…) todos nos hacemos mayores y eso es lo bonito. Eso quiere decir que hemos vivido.» Y así es; si tenemos un animal que ha llegado hasta aquí, debemos sentirnos orgullosos.
Orgullosos por ellos, por que tienen (o han tenido) la oportunidad de vivir y disfrutar, por que, muy seguro, han vivido muy felices a nuestro lado; y orgullosos por nosotros, ¿algo habremos hecho bien, no?
En el hospi nos sentimos muy orgullosos de cada ‘paciente’, pero tenemos un huequito especial en nuestra memoria, y en nuestro corazón, para estos abueletes. Y por ellos seguimos estudiando y formándonos en nuevas técnicas para que llegar a esas edades deje de ser una lacra.
Existen tres pilares básicos e importantísimos que deben funcionar a la perfección para que nuestros amigos vivan en las mejores condiciones; pero, a estas edades, son aún más importantes y hacen que el equilibrio no se desmorone: su cuerpo, su mente y su entorno.
Pero no nos engañemos, soñamos con que llegue el día en el que se pueda llegar a edades avanzadas sin ninguna repercusión en la salud, pero a día de hoy, como ocurre con nosotros, nuestras mascotas tienden a presentar ciertas enfermedades a medida que envejecen, como parte del proceso natural de la vida.
He aquí algunos consejos básicos a la hora de cuidarles:
- Ojo con la obesidad. Como es normal, a medida que se hacen mayores el ritmo de sus salidas (en el caso de los perros) o las horas que permanecen despiertos y activos (en el caso de los gatos), disminuye, con lo que debemos cuidar muy muy de cerca su alimentación. Por un lado para evitar que sufran sobrepeso y, por otro, para aportarle todos los nutrientes necesarios en esta etapa. Vuestro veterinario os aconsejará qué tipo de dieta es la mas adecuada para cada caso
- La hidratación siempre es un punto muy importante a tener en cuenta, nunca les debe faltar agua fresca y limpia a mano; pero, a estas edades, es vital. Debemos vigilar que beban y facilitarles el acceso al agua. En el caso de los gatos, que se suelen mover menos, déjasela lo más cerca posible de su lugar habitual de descanso
- Ojo con el baño: la piel y el pelo sufren el paso de los años, así que consulta con tu veterinario sobre qué productos son los más adecuados y la periodicidad para hacerlo. Cada perro, cada gato, son un mundo y dependiendo del estado de su piel te recomendarán unas pautas
- Como ocurre con nosotros, la boca es una de las partes que más sufre el paso de los años: no les des alimentos/premios/juguetes con los que se puedan hacer daño
- Además de la boca, los huesos son un parte importante a tener en cuenta, vigilar y cuidar. Adapta la actividad física (paseos, juegos…) a su estado y ten especial cuidado con caídas, golpes…
- El descanso se convierte en una parte muy importante del día: dales tiempo para ello y ofréceles un lugar cómodo para dormir
- Las visitas periódicas al veterinario siempre son importantes, pero a estas edades, más aún. Aunque goce de una salud envidiable y nos tenga ningún problema destacable, un mínimo de dos visitas al año al vete deberían ser obligatorias
Y sobre todo, al más mínimo indicio de que algo no va bien, ¡consúltanos!